La barrera aún está presente, y me he dado cuenta de cómo puedo dejar de escribir las cosas que tengo en la cabeza, si cada ser humano se expresa como quiere, fotos, sonrisas, ideas, actos. Y me veo cegado por una barrera que me impide escribir con tal fervor, con una emoción y quizá con algo de tiricia mesclada, las ideas que proliferan dentro de mi cabeza.
Me asusta pensar en este mundo sin literatura…
No sé qué hacer… yaaaaaaaa
Nunca desaparecerá la literatura, no mientras haya gente que cree en ella y no puede vivir sin escribir :) Echaba de menos la letra naranja de tu blog.
ResponderEliminarBesos de cristal